Equipo de Delegación Presidencial Provincial de Melipilla realizó una visita al Club de Personas Mayores “Los Robles”, quienes han desarrollado un exitoso taller de tejido de lana-vellón, iniciativa financiada gracias a recursos del Fondo Nacional del Adulto Mayor, “Hernán Zapata Farías”.
En representación de la Delegada Presidencial Provincial, Sandra Saavedra, asistió la encargada territorial, Marioly Guerra, quien destacó la labor, a través de la cual han logrado desarrollar nuevas habilidades, generando un espacio de colaboración entre integrantes de la agrupación.
“Estamos muy contentas y contentos como delegación presidencial de haber visitado a agrupación Los Robles de Melipilla, quienes están desarrollando su tercer taller de vellón, con hermosas creaciones. Nuestra Delegada Sandra Saavedra nos ha instruido a acompañar a las organizaciones, ver cómo han desarrollado sus proyectos del fondo adjudicado por Senama”, indicando que continuarán visitando a diversas organizaciones de la provincia.
Por su parte, Jenny Palacios, monitora del Taller, expuso que se trató de una experiencia enriquecedora. “Tengo grandes chiquillas, quienes están casi en la cuarta edad, hay mujeres mayores de 80 años que son muy activas, con gran energía y ganas de aprender, abiertas a las nuevas técnicas y muy joviales”, destacando que se ha encontrado con “grandes artistas, lo que me he sorprendido gratamente con sus habilidades como artistas y artesanas.”
La monitora agregó que además de poder compartir y socializar, “también la lanoterapia sirve para que se relajen, olviden sus problemas, lo pasen bien y compartan, acompañándose las unas a las otras, lo que es muy bonito de ver”, señaló.
Sonia Perez, presidenta del Club Adulto Mayor Los Robles, explicó que postularon a un proyecto de manualidades en arpilleras y vellón. “Estamos próximas a finalizar los talleres, y estamos contentas porque hemos aprendido muchas técnicas, tanto en arpillera como en vellón. Las monitoras que tenemos son muy buenas, nos preocupamos de buscar buenas instructoras, y que los materiales sean de calidad”.
Finalmente, expuso que SENAMA les adjudicó un millón de pesos, “pero nosotras hemos invertido un poco más, pero vale la pena, tanto en la ocupación del tiempo libre como en la camaradería entre nosotras. Si una está enferma, nos ayudamos y otra le enseña, entonces hemos utilizado muy bien los recursos, y estamos felices y agradecidas de SENAMA”.
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